El pasado 3 de diciembre en el Real Decreto Legislativo 1/2013 concretó que el 4 de diciembre de 2017 se fija como fecha límite para llevar a cabo las obras necesarias que garanticen que las personas con discapacidad puedan acceder a todos los espacios comunes de los edificios existentes.
Se trata de la aprobación del texto refundido de la ley general de derechos de las personas con discapacidad y de su inclusión social, que determina que en el plazo de dos años, "el Gobierno debe aprobar unas condiciones básicas de accesibilidad y no discriminación, para el acceso y la utilización de bienes y servicios a disposición del público para las personas con discapacidad ".
Esta normativa exige mejorar el acceso de las personas con discapacidad en todas las zonas comunes de la vivienda, lo que supondrá un esfuerzo económico a los propietarios, pero sin implicar una carga desproporcionada. Asimismo, la normativa también impone un límite en el pago de la eliminación de las barreras arquitectónicas: 12 mensualidades de los gastos de la comunidad. En los casos que no se pueda asumir el coste de las obras, se podrá admitir para determinados usos, soluciones alternativas que permitan la máxima accesibilidad posible.
Por lo que la ejecución de las obras, se llevará a cabo de manera diligente, así pues se establece un plazo de un año si se trata de obras menores y de dos años si se trata de obras más grandes, desde la fecha de notificación del acuerdo de la comunidad de propietarios. Plazo que se podrá ampliar si el coste que suponen las obras superan el 33% de los ingresos de la unidad familiar. Además, los ingresos familiares deberán estar por debajo de 2,5 veces el indicador de renta de suficiencia de Cataluña o el índice que lo sustituya.
La no ejecución de las obras necesarias podría suponer una sanción a la comunidad de propietarios, que figuran como responsables de cumplir con las condiciones de accesibilidad.
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Desde mediados de agosto ya está en funcionamiento la nueva ley de simplificación de la actividad administrativa y de impulso de la actividad económica. Abrir un negocio es ahora más fácil para un gran número de actividades de baja afectación medioambiental y que ahora estarán sujetas a declaración responsable.
Se trata entre otros del comercio al por mayor, al por menor de alimentos, bebidas y tabaco, el alojamiento turísticos, las actividades inmobiliarias y profesionales, y en general, las actividades comerciales de locales con una superficie inferior a 120 m2 o 500 m2 en el caso de actividades profesionales como la edición, publicidad, arquitectura o la compra venta de vehículos.
En estos tipos de negocio, el propietario podrá iniciar la actividad una vez posir en conocimiento de la Administración pública competente el inicio de la actividad mediante la presentación de una declaración responsable en la que tiene que declarar, que cumple los requisitos establecidos por la normativa vigente para acceder al ejercicio de la actividad, que dispone de un certificado técnico justificativo de cumplirlos y que se compromete a mantener su cumplimiento durante la vigencia del ejercicio de la actividad .
Se trata de un paso más hacia la simplificación administrativa iniciado con el régimen de comunicación previa, que si bien permitía abrir el negocio una vez hecha la comunicación, obligaba al propietario a acompañarla de un proyecto técnico justificativo del cumplimiento de los requisitos establecidos por la normativa vigente y firmado por un técnico competente, y del certificado del técnico competente que sea responsable de la puesta en funcionamiento de la actividad.
Las actividades que superen los límites de 120 m2 o 500 m2, o las que se consideren de ricos medioambiental, continuarán sujetos al régimen de comunicación previa.
Sin embargo, recuerde que tanto la comunicación previa como la declaración responsable, debe contener una manifestación explícita sobre la conformidad de la actividad económica con el régimen urbanístico del suelo, y habilitan de manera inmediata para el ejercicio de la actividad bajo la responsabilidad de su titular, al tiempo que faculta a la Administración para llevar a cabo cualquier actuación de comprobación.
Si necesita un técnico competente para la redacción del proyecto o el certificado técnico, puede solicitar presupuesto o consultar cualquier duda con el colegio de aparejadores, arquitectos técnicos e ingenieros de edificación de Tarragona, dentro del apartado obras con garantía.
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La humedad es uno de los principales problemas en todos los edificios. Goteras, el envejecimiento de la cubierta o la falta de mantenimiento son algunos de los problemas más extendidos. El resultado de estos problemas suele ser la aparición de manchas en techos y paredes, dañando así los acabados. Esto provoca que, con el tiempo, las humedades afecten a la estructura, favoreciendo la oxidación de elementos metálicos o la putrefacción de la madera. Por eso es importante revisar la cubierta cada año y reparar aquello que se va deteriorando.
Otro de los problemas habituales es la filtración de agua por la carpintería. Con el tiempo, el sellado de las ventanas se va deteriorando, debido a la radiación solar y el agua de la lluvia, creando manchas alrededor de la ventana. La mejor forma de evitarlo es renovar los sellados, limpiar las canaletas del marco y repintar los perfiles de la ventana cada tres años.
Los escapes o fugas de agua en la instalación sanitaria son las causas más comunes. Normalmente son fruto de un mal uso. También suelen aparecer problemas en instalaciones de agua y calefacción, ya que debido a la corrosión o a desperfectos en las uniones, pueden producirse escapes. La mejor manera para evitar este tipo de fugas y problemas es la prevención y seguir una inspección periódica.
También podemos encontrar casos de humedad cuando tenemos una vivienda con un aislamiento técnico insuficiente y una ventilación deficitaria, que no permiten renovar el aire cargado de humedad. El resultado es la condensación del vapor de agua del aire en paredes y techos, creando así manchas. La mejor forma de prevenirlo es mantener una correcta ventilación de las habitaciones.
En muchos edificios antiguos también podemos encontrar manchas de humedad en pavimentos de la planta baja, provocadas por la humedad contenida en el suelo y que va ascendiendo por la pared, deteriorándola y provocando el desprendimiento de la pintura y los enlucidos. En los edificios actuales se ha solucionado, pero en las viviendas antiguas la solución requiere la utilización de técnicas que solo un aparejador profesional puede llevar a cabo.
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Las viviendas bioclimáticas se han convertido en una realidad aún desconocida por muchos usuarios. Nuestra vivienda puede estar preparada, solo con el uso de energías naturales, para tener un total confort técnico, acústico y lumínico . Y todo esto sin que represente un aumento del coste económico.
Hay muchos factores que pueden ayudar a una vivienda a aprovechar los recursos naturales al máximo. Algunos de estos factores pueden ser la orientación y la forma. Una casa alargada puede tener una buena iluminación y ventilación, pero está más expuesta a la temperatura exterior al tener más superficie de fachada. En cambio, una forma más cuadrada y compacta puede tener menos iluminación, pero está más resguardada del frío. También debemos tener en cuenta la orientación, pues según esté más al sur o al norte, la temperatura interior puede variar. Es importante encontrar el equilibrio.
El sol y el aire juegan un papel muy importante para mantener la casa aclimatada sin necesidad de una instalación artificial. Podemos sacarle provecho mediante sistemas como el efecto invernadero. El caso contrario lo podemos encontrar durante el verano donde, una buena protección solar mediante toldos o marquesinas junto a una buena ventilación, pueden garantizar un verano fresco sin necesidad de aparatos de aire acondicionado. Incluso la colocación de plantas cerca de las ventanas puede ayudar a enfriar el aire gracias a la evaporación del agua.
También es importante la correcta disposición de las ventanas para disponer de una buena iluminación natural dentro de la vivienda y que ésta esté muy repartida. Las ventanas u ojos de buey en el techo mejoran mucho la iluminación, ya que el sol incide directamente durante más horas.
Otro factor muy importante es la geometría de la casa. Es fundamental que la vivienda esté bien situada respecto a una carretera o una calle para aislar el ruido exterior lo máximo posible.
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Las grietas son un problema bastante común en todas las viviendas, por eso es muy importante informarse sobre qué tipos pueden suponer un grave peligro para nuestro edificio.
Existen varias formas de diferenciar las grietas que son estructurales de las que no lo son. Las grietas estructurales pueden aparecer en diferentes partes del edificio, como la cubierta, los cierres o en la propia estructura. Pueden suponer un gran peligro. En cambio, las grietas no estructurales no son tan graves y pueden aparecer por otras causas, como cambios de temperatura repentinos, dilatación o retracción de algunos materiales de construcción al endurecerse o movimientos causados por la humedad.
Otra de las zonas más susceptibles de sufrir grietas son los techos. Acostumbran a ser grietas estructurales, que pueden ser causadas por un exceso de peso o por un deterioro de sus materiales por efecto de la humedad.
Otro detalle a tener en cuenta es la dirección de las grietas. Las grietas longitudinales respecto al sentido de las vigas no presuponen un peligro especial. En cambio, las que siguen un sentido perpendicular al de las vigas indican un peligro inminente. Especialmente si se encuentran cerca de paredes maestras o pilares de la vivienda. Es importante determinar qué tipo de grieta es, puesto que la solución será diferente en cada caso.
También podemos encontrar pequeñas grietas en baldosas del suelo o de tabiques. A pesar de parecer insignificantes, pueden servir de aviso para algunos problemas en la vivienda. Por eso, es recomendable una inspección para determinar el peligro.
La gravedad de las grietas estructurales sólo la puede determinar un especialista. Una reforma casera de estas características y sin ningún tipo de asesoramiento técnico puede originar problemas mucho más graves.
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